Es bastante frecuente hoy en día que nuestro perro o gato a lo largo de su vida sufra o haya sufrido alguna situación que le haya provocado estrés. El modo en el que educamos es la clave para regular la manera en la que el animal va a enfrentarse a estas situaciones, pero es frecuente que, según la magnitud de ellas, se suela alterar su comportamiento.
Muchas veces este estrés puede llegar a tener consecuencias sobre la salud o bienestar de nuestra mascota, pero en muchas ocasiones pasa desapercibido. En numerosas ocasiones se manifiesta con mala conducta, y esto conlleva a que no lo identifiquemos correctamente ni lo tratemos como se debería.
No todas las situaciones son igual de estresantes para cada animal, es algo individual. Lo que a unos puede causar mucho estrés puede que a otros les resulte totalmente indiferente.
A continuación, os detallaremos las principales causas de estrés, tanto de perro como de gato, que suelen pasar desapercibidas ya que no se las suele relacionar con la sintomatología presentada.
Causas frecuentes de estrés que el propietario no puede detectar:
PERROS:
- Realizar poco o demasiado ejercicio físico: El defecto provocará una frustración que es posible que desencadene un comportamiento destructivo en el hogar y el exceso podrá provocar dolor articular.
- No sociabilización: cuanto menos interactúe, mas huraño y asocial se volverá, desencadenando comportamientos desconfiados e incluso agresivos.
- Aburrimiento: Ofrecer siempre los mismos estímulos, tanto e casa como de paseo, durante un tiempo insuficiente.
- Soledad: Un perro que pasa más de 5 horas solo en casa comienza a sentir soledad y estrés.
- Desconocidos: Procura que la gente sea respetuosa con su espacio vital y tiempos de acercamiento, no todos los perros lo llevan de la misma manera.
- Exclusión: La prohibición de ciertas zonas de casa puede tener efectos negativos, ya que el animal puede sentirse solo y desprotegido estando lejos del resto de la familia.
- Castigos y violencia: Los estrictos castigos tienen siempre un efecto sumamente negativo y aumentan mucho el estrés sufrido. No relacionan las acciones realizadas con el castigo recibido así que desde JTPHARMA te recomendamos que, si lo necesitas, contactes con un veterinario Etólogo para solventar tus dudas en la educación de tu perro.
- Exceso de atención: Puede llegar a provocar agobio en el animal. Necesitan sus tiempos y espacios para la relajación. Si intentan huir, déjalos.
- Falta de estímulo mental, aburrimiento: Ejercitar con retos, premios, olores, juegos, harán que tu mascota se desarrolle apropiadamente. Esto libera estrés y mantiene al perro activo y feliz. Ofrecer siempre los mismos estímulos, tanto e casa como de paseo, durante un tiempo insuficiente provocará en nuestro animal tristeza, aburrimiento y estrés.
- Estar atado o encerrado: Además de ilegal, provoca efectos muy negativos en el animal (quitando claro, excepciones en las que sea necesario, por ejemplo, cuidados especiales o ciertas situaciones de cachorros.)
GATOS:
- Falta de enriquecimiento ambiental: Es un animal cazador y aventurero, debemos jugar con él y proporcionarle retos y juguetes.
- Falta o insuficiencia de areneros o comederos: Son territoriales. Debes adecuar el número de comederos y areneros según el número de gatos del hogar. Además de tenerlos físicamente separados ya que es un animal escrupuloso.
- Socialización temprana inadecuada: Si nunca socializa con otros animales, de adulto se volverá reacio a nuevos miembros del hogar (Humanos o animales).
- Manipulación o inmovilización forzada: Moverlos o manejarlos en contra de su voluntad.
- Situaciones conflictivas
- Castigos: Como ocurre en perros, siempre tienen un efecto sumamente negativo y aumentan mucho el estrés sufrido. No relacionan las acciones realizadas con el castigo puesto.
- Desnutrición: Sentir hambre les genera estrés.
- Dolor y miedo: Ese tipo de emociones no pueden gestionarlas, provocando estrés y muchas veces agresividad.
- Aislamiento o hacinamiento: Son animales sociables así que la soledad no les gusta, pero el exceso tampoco.
- Cambios de rutinas: Son animales de costumbres, les gusta controlar tanto el territorio como lo que ocurre en su día a día.
- Interacciones sociales bruscas o desagradables: En general, toda situación social que ellos no puedan controlar o que les haya pillado por sorpresa.
Síntomas frecuentes de estrés:
PERROS:
- Hiperactividad, energía desmesurada.
- Movimientos o conductas repetitivas sin aparente motivo o razón, estereotipias.
- Jadeo recurrente.
- Miedos o comportamientos asustadizos, pudiendo desencadenar agresividad.
- Excesivo rascado, compulsivo.
- Apatía.
- Pérdida de pelo.
- Incapacidad de concentración, despiste.
- No obedecimiento de las órdenes
- Rigidez muscular.
GATOS:
- Realizan sus necesidades fuera del arenero
- Muestran conductas compulsivas o estereotipias como acicalado excesivo o contracción espasmódica de los músculos de la espalda.
- Muestran comportamientos agresivos repentinos.
- Comen menos, o incluso dejan de comer. A veces ingieren cosas extrañas como por ejemplo trozos de tela.
- Marcaje con orina o rascado de uñas.
- Apertura bucal exagerada e incluso continua.
Si bien es cierto que hay muchas ocasiones en las que no sabemos que nuestro animal sufrirá estrés, hay muchas otras en las que, de antemano, tenemos pleno conocimiento de ello. Ejemplos claros son: Visitas al veterinario, viajes, ruido de petardos o fuegos artificiales, etc. Cada animal es diferente y cada propietario, conociendo a su animal, es capaz de saber que tipo de situaciones crearán incomodidad y/o estrés a su mascota.
Desde JTPHARMA te recomendamos que, ante todo, visites a un veterinario Etólogo que te pueda asesorar y enseñar cómo entender y respetar las necesidades de tu perro o gato. Además, o bien si sabes que vas a someterlo a una situación estresante, o bien si estás trabajando en una ansiedad patológica, el uso de RELAXING PHARMA, con base de triptófano y glutamina, para el alivio de esas situaciones estresantes. SIEMPRE SIGUIENDO LAS PAUTAS DE TU VETERINARIO DE REFERENCIA.